Hola!!!! Aquí estoy de nuevo, esta vez con un colgante. Es muy fácil de hacer y requiere pocos materiales. Y quedan súper bonitos!!!!
Materiales:
-Alambre de aluminio de varios colores
-Piedra o cristal
-Alicates de corte o tijeras
-Alicates de punta cónica o pincel o lápiz redondo
-Celo
¿Dónde encontrar los materiales?
El aluminio de colores se puede comprar en tiendas de manualidades o en bazares chinos. Los hay de varios diámetros, para este colgante es mejor que todos los colores sean del mismo tamaño.
El cristal que utilizo yo es de esos de decorar jarrones, lo podéis encontrar en tiendas de decoración, yo lo compré en un bazar chino, en una bolsa que venían un montón. Pero también podéis utilizar minerales o cantos rodados, en general cualquier piedra que no tenga aristas, para que no haga daño. El tamaño de la mía es aproximadamente de 3,5x3 cm, pero eso sólo importa para el largo del aluminio que necesitamos. Podéis elegir la que más os guste, eso sí, ojo que no pese mucho, jajajaja.
En los ejemplos que os he puesto arriba el primero es con aluminio de 1mm de diámetro y cada trozo debe tener aproximadamente 40 cm, he utilizado 6 colores. El segundo y tercero son de 1,5mm de diámetro y 30 cm de longitud, he utilizado 5 colores. Cuanto más fino más número de alambres podemos utilizar y más vueltas podremos darles. Podéis elegir cada alambre de un color, o todos iguales, o repitiendo, lo único que importa es que os guste como queda y que el ancho total de los alambres quede proporcionado con la piedra que utilicéis. Tened en cuenta que el largo del alambre también dependerá del tamaño de la piedra, no sólo de su diámetro. Es preferible cortar de más que quedarnos cortos, en el primer colgante podéis medir lo que os sobre y así haceros una idea para los siguientes.
Cortamos los alambres, en mi caso uno azul, dos celestes y dos morados, todos de 1,5mm de diámetro y 30 cm de largo. Los ponemos en el orden que queramos, a veces como no se quedan rectos del todo parece difícil, pero no os preocupéis id colocándolos según lo vais utilizando. Los igualamos en un lado.
Con el alicate o con el pincel doblamos la punta, vamos a hacer la argolla pon donde se va a colgar, así que no la hagáis muy pequeña, a ver si luego no va a entrar ninguna cadena. Yo le he puesto una protección a mis alicates para no marcar el aluminio y que quede más pulido el trabajo. Venden unos de nylon para estos menesteres pero me parecen muy caros y de momento con esto me apaño.
Y con ayuda de los dedos le vamos dando la forma que veis en la foto, para que encaje bien la piedra. Con estos alicates es más fácil hacerlo, pero no son necesarios. Para que resulte más fácil trabajar ponemos un poco de celo en la punta, sujetando todos los alambre, esto ayuda a que se muevan menos.
La primeras veces que hagamos este colgante puede resultar muy difícil, porque hay que estar sujetando con una mano constantemente la piedra y los alambre para que no se muevan, pero paciencia, que acaba saliendo. Colocamos la piedra como nos gustaría que se viera, con la argolla arriba y el final del alambre contra ella, para que queden escondidas esas puntas. Apretamos fuerte y torcemos un poco la parte de abajo del aluminio y empezamos a girar, con mucha paciencia y sujetando muy bien. Si os resulta complicado id de alambre en alambre, procurando que queden pegados.
Damos las vueltas que nos gusten. Ahora hay que esconder el final del alambre, para que no pinche. Miramos detrás de que parte podemos meterlos y los cortamos a esa medida, con cuidado levantamos un poco esos alambres y metemos las puntas, de una en una es más fácil. Si no os fiáis podéis ponerle una gota de pegamento (transparente por favor, jajajajaja), pero no debería ser necesario. Ahora podemos apretar más los alambre, juntarlos, colocarlos mejor si hiciera falta y dejarlo precioso :)
Quitamos el celo y recolocamos la argolla, que seguro que se ha movido un poco y listo!! Para comenzar es mejor hacerlo con aluminio fino, es más manejable, para coger práctica, jajajajaja.
En el próximo post os enseño a hacer una cadena de cola de ratón para que podáis lucirlo.